El Paseo de la Grúa es uno de los lugares que un turista no se puede perder. Se encuentra ubicado en el extremo oriental de la ría. Comenzamos en el puerto pesquero de la villa y poco a poco tenemos unas bellas vistas panorámicas de la Playa de Santa Marina. Durante el recorrido nos encontraremos varios paneles con la mitología asturiana con sus xanas, cuélebres, trasgus y nuberus entre otros personajes.
En este mismo paseo encontramos 6 paneles de cerámica con la historia de Ribadesella, obra del genial humorista Antonio Mingote.
Paralelo al Paseo de la Grúa hay un pequeño paseo de poco más de 1,5 km. que sube a la ermita de Nuestra Señora de Guía o simplemente de la Virgen de Guía. Estamos en el Monte Corberu, un pequeño promontorio con unas bellas vistas de la villa riosellana y del Mar Cantábrico, donde podemos encontrar un mirador. La capilla es na obra de estilo renacentista construida en el siglo XVI, aunque posteriormente, a finales del siglo XIX sufrió una reforma. En su interior se encuentra la patrona de los marineros. En la parte trasera de la ermita hay unos cañones en buen estado de conservación que sirvieron para defensa de la villa.